El rol de la partera en un parto en casa
El rol de la partera en un parto en casa
La partera representa la figura femenina con experiencia que viene a aportar calma y saber a la futura mamá.
La partera representa la figura femenina con experiencia que viene a aportar calma y saber a la futura mamá. En el parto natural y en el parto en casa, la obstétrica o partera cobra un lugar muy especial, ya que justamente se define como aquella persona habilitada para la atención de embarazos, partos y
puerperios normales.
La relación de la madre y la partera
Cuando la mamá ha decidido junto con su familia que el parto se desarrollará en su casa, la relación con la partera se va estableciendo desde los primeros meses del embarazo con esta premisa: llegar juntas a conocerse para alcanzar lo que la mujer embarazada ha logrado ir definiendo como un parto ideal. La relación se profundiza en las últimas semanas en las que se transmiten los detalles de lo que será el trabajo de parto.
Trabajo de parto con una partera
Cuando la futura mamá siente las primeras contracciones se lo comunica a la partera quien acude a la casa una vez que la mujer siente que llegó la hora de requerir su compañía, sin duda, cuando el trabajo previo ha comenzado.
La partera se mantiene en constante comunicación con
el obstetra para tenerlo al tanto de cuándo su presencia será requerida en la casa. En el momento en que empiecen los primeros dolores fuertes, será la partera quien recordará a la parturienta, cuál era su plan ideal, cuáles eran sus sueños para este momento, cuáles eran los pasos acordados en relación a respiración, relajación y actitud. Luego, la ayudará a explorar las herramientas para poder hacerlo posible.
Para que un parto en casa cumpla con las condiciones ideales, la partera elegida debe tener el don de la sensibilidad, la empatía y la apertura suficientes como para entender que cada parto y cada mujer son diferentes.
El éxito de esta mujer que en épocas pasadas se conocía como “matrona”, depende sobre todo de su habilidad para poner sus propios recursos a favor de un parto saludable.
Insomnio y cansancio durante el post parto
Cuando el bebé está en casa, tus momentos de descanso dependen de su sueño. Incluso, es común que no logres dormir cuando tengas la oportunidad de hacerlo. Por suerte, se trata de una etapa que lograrás superar siguiendo algunos sencillos consejos.
- Descansar no siempre implica dormir: si tu bebé está durmiendo y no tienes sueño, puedes aprovechar ese momento para hacer algo que te gratifique. Leer algo ameno, escuchar música o hacer ejercicios suaves puede resultar reparador. Prueba mantener una respiración lenta durante algunos minutos para reponer energía y relajarte.
- Buena alimentación: el cansancio suele crispar los nervios; por eso, ayúdate con una buena dieta y evita las comidas pesadas, las bebidas colas y el café. Prueba infusiones alternativas de tilo o valeriana. También ten presente que no es momento para obsesionarse con dietas para bajar de peso.
- Pasea a tu bebé: si tu pediatra lo permite, y no hace mucho frío o calor, puedes llevar a tu bebé de paseo en el cochecito por tu barrio. Cuando caminas te ejercitas y recuperas energía.
- Apoyo familiar: puedes aprovechar los fines de semana para lograr un descanso más profundo. Busca delegar los cuidados de tu bebé en tu marido o en los abuelos. Cambiar los pañales o dar el biberón puede ser de gran ayuda para revertir parte del agotamiento que acumulas en la semana. Además, es importante que la familia esté atenta para advertir cualquier signo de depresión post parto, típico de este período.